-¿Duele? –Esa pregunta tan infantil brotó de los labios del chico sin que él pudiera impedirlo.
-¿Si duele morir? No, en absoluto. Es más rápido y más fácil que quedarse dormido.
-¿Si duele morir? No, en absoluto. Es más rápido y más fácil que quedarse dormido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario